El modo Dawn of War 3: The Last Stand se perdió mucho

Si no eras fanático del único modo multijugador de Dawn of War 3 cuando se lanzó, no hay nada para ti aparte de la campaña.

Los juegos de Dawn of War, como muchos juegos de estrategia en tiempo real de su generación, siempre han atraído a dos tipos de jugadores. Hay un grupo de personas que aparecen en historias y tradiciones, mientras que otro, más hábil, se siente atraído por las complejidades del modo multijugador.

Hasta que Dawn of War 2 introdujo el modo Last Stand, mi tiempo fuera de la campaña generalmente solo duraba unas pocas horas.

Ahora que juego el único modo multijugador de Dawn of War 3, puedo decir con seguridad que logra un buen equilibrio entre el juego centrado en la economía del pasado y los juegos más centrados en la acción de su predecesor. La cuestión es que sigue siendo más exigente de lo que mi cerebro (entrenado para pensar en términos de C&C) puede manejar.

El nuevo modo presenta una configuración de carril estilo MOBA, así como escudos que deben destruirse para exponer las torretas, que a su vez abren el núcleo para atacar cuando son derribadas. Esto es lo principal que sabes sobre los MOBA, excepto que aquí también te preocupas por la economía y construyes unidades para guiarlas hacia esos objetivos en lugar de directamente hacia la base del oponente.

No tengo ningún entusiasmo por este nuevo y divertido enfoque (tendrás que leer nuestra reseña), pero puedo decirte que se juega como un MOBA y, naturalmente, es poco probable que me guste.

Tengo que darle accesorios a Relic para probar al menos algo nuevo, pero mi cínico lo ve como una forma de atraer a los jugadores de MOBA al género, una estrategia que nunca antes había funcionado en otros juegos.

Sin embargo, cada vez que incursiono en el modo multijugador durante la campaña, me doy cuenta de que casi la mitad de los juegos no se verán afectados. Estás aún más decepcionado cuando ves que la campaña de un juego está bien diseñada. Es fácilmente el mejor de la serie, con un valor de producción nunca visto en un juego de Warhammer 40,000.

Sorprendentemente, años más tarde, la combinación original de historias y referencias a la tradición de Relic sigue siendo la mejor representación de este universo en cualquier juego. Diría que los Marines Espaciales en tercera persona estuvieron cerca, pero eso solo probaría el estado de Relic.

Cuando el estudio lanzó las primeras imágenes de las escenas del juego, me preocupaba un poco que el valor de producción de Dawn of War 3 bajara. Parece que el equipo ha decidido construirlas en torno a tomas en stop-motion de las figuritas en lugar de las cinemáticas generadas por ordenador (potencialmente más caras).

Después de la campaña, te puedo decir que me equivoqué. Estas escenas fueron lo más destacado de mi experiencia, estaban tan bien hechas, bien filmadas y enmarcadas que no estoy seguro de poder decir con certeza que en realidad costaron menos que las generadas por computadora.

Las reliquias pueden usar figuritas para hacerlas, pero también cobran vida gracias a ellas. Estaba completamente absorto en las historias gracias a los fondos dinámicos y al excelente uso de la actuación de voz y la música.

También me preocupaba que este enfoque condujera a expresiones menos emocionales, ya que la escultura estática es difícil de hacer, pero todo se evaporó cuando vi por primera vez a Gabriel Angelos proclamando con orgullo su ideología con los dientes apretados.

Las identidades de cada una de las tres razas de Eldar, Marines Espaciales y Orcos están bien conservadas y bien representadas. Los Marines Espaciales son tan trabajadores, estoicos y disciplinados como usted sabe, sirviendo solo al Emperador y entre ellos. Los orcos son un grupo de personas agresivas y astutas que intentan aprovechar al máximo cada situación y siempre fallan en ver el panorama general. Y los Eldar, una raza tecnológicamente superior y bien fundamentada que confía con demasiada frecuencia en sus creencias y profecías a su favor casi en su contra.

Es increíblemente satisfactorio verlos encontrarse en la batalla, discutiendo sobre un objeto codiciado, solo para ser interrumpidos por otros asuntos internos. El estilo de sonido, la música, las presentaciones e incluso los filtros de audio y los retratos de los personajes van mucho más allá de cualquier otro juego que trate un tema de futuro oscuro.

Teniendo en cuenta la cantidad de misiones para un solo jugador que te permiten controlar uno o unos pocos héroes, espero que este tipo de juego se transfiera a los modos de estilo Last Stand. Dawn of War 3 se toma a estos héroes aún más en serio que cualquier juego anterior, llamándolos élite.

Estos personajes ya tienen suficientes habilidades y destrezas para sobresalir y asumir diferentes roles tácticos. Todo lo que hay que hacer es expandirlos ligeramente.

Last Stand, para empezar, es un modo cooperativo donde cada jugador controla a un héroe contra oleadas cada vez más difíciles. La estrategia consiste en saber lo que puedes y no puedes hacer y sincronizar tus habilidades con las de tus aliados para despejar el tablero lo más rápido posible.

Para mi sorpresa, el Last Stand no se encontraba por ninguna parte. En este punto, todo lo que me queda es el modo campaña y nada más. En esta era moderna en la que casi todos los juegos tienen algún tipo de modo cooperativo, es un poco sorprendente ver que Relic parece tener la intención de cambiar el modo RTS con este nuevo modo multijugador, pero de alguna manera pierde la oportunidad de hacer que el juego sea parejo. mejor Confuso. Atrae a una multitud menos centrada en varias personas.

Blizzard se ha mantenido tradicionalmente firme con cada nueva expansión de StarCraft 2, presentando un modo arcade y otros eventos centrados en la cooperativa que expanden el juego más allá de la campaña. Incluso Microsoft logró proporcionar un modo cooperativo para el mediocre Halo Wars 2.

Fue decepcionante ver a Relic lanzar Last Stand esta vez, especialmente dado lo popular y fresco que era en ese momento. Imagina una versión más evolucionada de Last Stand, en algún lugar entre las estrictas convenciones de MOBA y las misiones heroicas de la campaña fáciles de ingresar.

A menos que se introduzca algo de este estilo para aquellos de nosotros que no podemos entrar en el modo multijugador, me temo que nunca volveré a empezar Dawn of War 3 hasta el inevitable lanzamiento de la primera expansión.

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